Spectre

Sam Mendes repite como maestro de ceremonias de lo nuevo del agente 0007. Spectre continúa la senda trazada con la excelente 'Skyfall', la cual le reportó un extraordinario éxito crítico y comercial. Una reivindicación de los orígenes del personaje, aquí recuperando a SPECTRE, la organización terrorista que había marcado las primeras entregas cinematográficas de James Bond. No sólo se trata de un recuerdo al pasado, a la iconografía de las películas que protagonizaron Sean Connery, George Lazenby y Roger Moore, sino que magistralmente lo enlaza con el recorrido de las últimas aventuras protagonizadas por Daniel Craig.

Un nexo entre pasado y presente que se convierte en lo más valioso de un filme que desgraciadamente achaca su larga duración y la rémora de venir precedida de la que probablemente se trate de la mejor película de la franquicia. Tampoco ayuda que en la canción elegida en esta ocasión, una de sus señas de identidad características, parezca que haya primado más la notoriedad del artista que la consistencia del tema, el cual no resulta para nada reconocible.

Lo cual no puede empañar las virtudes de la cinta. Un comienzo vertiginoso en Ciudad de México durante la celebración del Día de los Muertos que termina con un espectacular intercambio de golpes en las alturas de un helicóptero es el preludio de una bajada a los infiernos del héroe, donde los fantasmas del pasado volverán a emerger sacando a la luz las cicatrices familiares de una infancia desgraciada. Ahí entra en escena el villano Oberhauser, un correcto Christopher Waltz que todavía no ha borrado la imagen de sus trabajos con Tarantino. Lo mejor es la riqueza de su personaje, el cual da significado y contexto a Spectre, un homenaje al legado de James Bond. Todo un regalo para los fans. Aunque Monica Bellucci sea un reclamo y Lea Seydoux no brille, como ocurría con 'Skyfall' la verdadera Chica Bond no es la típica. Moneypenny es la estrella de la función, uno de los mayores aciertos de casting que nos deja Sam Mendes, un director que ha revitalizado 007 y que una vez reconocida su extraordinaria aportación debe dar paso a savia nueva.  Gracias, señor Mendes.